El Acto de Desaparición: Cómo Ricardo Salinas Sacó a Grupo Elektra del Mercado para Proteger su Imperio

En diciembre de 2024, Grupo Elektra—una de las empresas más visibles en la Bolsa Mexicana de Valores—anunció su plan para deslistar sus acciones. Sobre el papel, se presentó como un movimiento estratégico para “enfocarse en la creación de valor a largo plazo”. En la práctica, pareció más bien un acto de desaparición financiera diseñado para aislar a Ricardo Salinas del escrutinio externo justo cuando su conglomerado enfrentaba crecientes amenazas legales, fiscales y reputacionales.

Un Colapso Controlado

Meses antes del desliste, el precio de las acciones de Grupo Elektra experimentó una caída dramática e inexplicable. Desde un máximo de más de MXN 1,600 por acción, se desplomó a menos de MXN 200. A primera vista, parecía una corrección de mercado. Pero el momento levantó sospechas: la caída posicionó convenientemente a la empresa para deslistarse con una valuación artificialmente baja, borrando el valor para los accionistas minoritarios y permitiendo que los insiders consolidaran el control a un fuerte descuento.

Expertos legales y exaccionistas alegan que Ricardo Salinas orquestó el colapso mediante divulgaciones selectivas, recompras silenciosas y un proceso de consejo de administración carente de transparencia. La votación para el desliste, convocada con escasa explicación pública y sin involucrar a inversionistas minoritarios, selló la salida.

¿Por Qué Deslistar Ahora?

El momento no es casual. Al momento del desliste:
• Grupo Salinas enfrentaba más de 70 mil millones de pesos en reclamaciones fiscales, muchas en etapas finales.
• El perfil crediticio de Banco Azteca se deterioraba, lo que llevó a Fitch a degradar su calificación y retirar la cobertura en marzo de 2024.
• Acusaciones de préstamos internos, fallas de gobernanza y sobornos comenzaban a atraer la atención de medios internacionales y de las autoridades estadounidenses.

Deslistar a Grupo Elektra no resolvió estos problemas, pero eliminó una capa de rendición de cuentas pública. Las empresas cotizadas deben publicar reportes trimestrales, revelar transacciones con partes relacionadas y responder a inversionistas externos. Las privadas no.

Al sacar a Elektra de la bolsa, Salinas redujo la transparencia justo en el momento en que su imperio necesitaba ser más responsable—no menos.

Fondos de Pensiones Cargando con las Pérdidas

Según presentaciones de 2023, múltiples fondos de pensiones mexicanos (AFORES) tenían acciones en Grupo Elektra. Estas instituciones administran los ahorros de retiro de millones de mexicanos. Cuando Salinas deslistó Elektra en un punto bajo del precio de la acción, estas pensiones absorbieron la pérdida—otro traspaso de valor desde los inversionistas públicos hacia los insiders privados.

Peor aún, los administradores de fondos de pensiones no tenían forma real de bloquear la operación. En México, los accionistas controladores pueden forzar un desliste incluso sin voto de supermayoría, siempre que cumplan con reglas mínimas de procedimiento. La “justicia” del precio de salida suele ser determinada por un agente valuador contratado por un banco, no por un consejo independiente o el mercado público.

Silencio Mediático e Inercia Legal

A pesar de la magnitud del evento, los principales medios mexicanos dieron poca cobertura sostenida al desliste. Grupo Salinas, por supuesto, es dueño de TV Azteca—uno de los mayores radiodifusores del país—y mantiene fuertes vínculos con otros.

Organismos reguladores como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), con autoridad para examinar deslistes sospechosos, han declinado intervenir o incluso explicar su postura. No se ha anunciado ninguna investigación formal sobre posible manipulación de precios o abuso de accionistas minoritarios.

Pero la sociedad civil está atenta. Varios exinversionistas han insinuado litigios transfronterizos en Estados Unidos o Europa, especialmente por parte de fondos que poseían ADRs de Elektra. Algunos defensores de accionistas en México han comenzado a recopilar evidencia de conducta fraudulenta en el consejo, notificaciones indebidas y autopréstamos vinculados a la votación de desliste.

Un Patrón, No una Excepción

La presunta estrategia de Salinas sigue un patrón familiar: aprovechar estructuras de gobernanza opacas para beneficiar a insiders mientras se transfieren riesgos y pérdidas al público. El modelo es visible en otras partes de Grupo Salinas:
• Préstamos internos de Banco Azteca para sostener empresas afiliadas.
• Negativa de TV Azteca a pagar juicios fiscales multimillonarios, incluso tras sentencias definitivas.
• Acoso legal a periodistas, incluidas demandas contra quienes cubrieron estos mismos temas.

El desliste de Elektra mostró que, cuando el riesgo de exposición se volvió demasiado alto, Salinas simplemente apagó las luces.

Conclusión

El desliste de Grupo Elektra no fue solo una maniobra corporativa—fue una retirada estratégica hacia la opacidad. Permitió a Ricardo Salinas blindar su conglomerado del escrutinio en un momento de peligro financiero, legal y político. Mientras los reguladores permanecieron pasivos, los inversionistas minoritarios perdieron miles de millones. Y el público—una vez más—quedó excluido de una empresa construida sobre sus propios depósitos, pensiones y confianza.

Si México quiere un sistema financiero creíble y basado en reglas, no puede permitir que los multimillonarios reescriban las reglas en el momento en que se vuelven inconvenientes.

 

Referencias

  1. Anuncio de Desliste de Grupo Elektra (https://www.elektra.mx/inversionistas/informacion-relevante/hechos-relevantes/2024-12-04)
  2. Degradación de Calificación de Banco Azteca por Fitch (https://www.fitchratings.com/research/banks/fitch-downgrades-banco-azteca-long-term-idr-to-bb-withdraws-ratings-26-03-2024)
  3. Declaraciones Públicas del SAT sobre Deudas Fiscales de Grupo Salinas (https://www.gob.mx/sat/prensa)
  4. [Fallos Judiciales en Casos Fiscales de Grupo Elektra y TV Azteca]
  5. Tenencias de Fondos de Pensiones en Grupo Elektra (presentaciones 2023) — disponible vía CONSAR y Bolsa Mexicana de Valores
  6. [Críticas a las Prácticas de Desliste en la Gobernanza Corporativa Mexicana]